La actuación se ha ejecutado en la antigua mansión de los Condes de Bornos, después conocida como la casona de los Longué. Ubicada en el número 2 de la olmedana plaza de San Julián.
Este edificio ha sido recién rehabilitado y recuperado para disfrute de la Villa junto a la remozada muralla que delimita un recinto de 5.000 m².